Empleo de alternativas forrajeras como medida agroecológica para luchar contra la sequía en las explotaciones lecheras de ganado vacuno

Abstract

Las praderas de raigrás inglés y trébol blanco, muy extendidas en Galicia, suministran la mayor parte delalimento consumido por las vacas lecheras. Estas praderas resultan de fácil manejo, sin embargo, su crecimiento puede verse limitado en áreas propensas a condiciones de sequía durante el verano.Las diferentes especies integrantes de una pradera muestran generalmente un pico de crecimiento del pastoen primavera y un descenso en invierno. Bajas precipitaciones y altas tasas de evaporación son la principalcausa del descenso en el crecimiento del pasto durante el verano. El raigrás inglés y el trébol blanco son dosespecies forrajeras cuyo crecimiento se ve muy disminuido durante los períodos de déficit hídrico. Lo cualnos dirige hacia la pregunta de si existen otras especies de plantas que puedan ser introducidas como alternativas forrajeras en las explotaciones lecheras gallegas para paliar las épocas de sequía. A la hora de plantearsela introducción de dichas alternativas conviene tener presente que:▶ No todas las especies son adecuadas para todos los tipos de suelos. El raigrás inglés es una especie bastante versátil, pero algunas especies como la alfalfa y la achicoria necesitan suelos profundos, de drenajelibre, para poder alcanzar su potencial productivo. Las especies alternativas se las podría considerar puesforrajes apropiados para ocupar una parte de la superficie en la explotación.▶ La calidad del alimento resulta un importante punto a tener en cuenta con la que mantener la producciónde leche en los niveles deseados durante el verano, porque es en este momento cuando las praderas deraigrás inglés se encuentran en sus niveles más bajos de digestibilidad. El trébol blanco puede mejorarsignificativamente la calidad del alimento bajo estas circunstancias, pero el trébol blanco es también muy sensible a los bajos niveles de humedad del suelo por lo que no se puede esperar lograr de él que produzcamucho alimento en condiciones de sequía y es necesario recurrir al empleo de otros forrajes suplementarios con los que intentar paliar la falta de alimento en la explotación.▶ Las especies que se pastan directamente son más rentables que aquellas que necesitan ser conservadas yalmacenadas. Esto es debido a que existen costes extra asociados con la conservación y almacenamientode los forrajes, y pérdidas extra en materia seca y valor nutritivo de las plantas que no ocurren cuando unapradera o un cultivo son directamente pastados.▶ Hay pocas situaciones en las que ocurra el reemplazo total del raigrás inglés/trébol blanco por especiesalternativas como principal base forrajera. Esto es debido a que los rendimientos productivos no son tanelevados y existe un riesgo mayor asociado a su uso, motivado por el hecho de que los cultivos requierenunas determinadas fechas de siembra y recolección para conseguir los mejores resultados, y cuando las condiciones climáticas o la disponibilidad de maquinaria y la mano de obra interfieren en el tiempo de siembray recolección se pueden ver mermados los resultados. Un concepto muy útil a tener en mente cuando seutiliza esta aproximación es la idea de complementariedad, es decir, cómo podría encajar el uso de alternativas forrajeras al raigrás inglés y el trébol blanco para mejorar el suministro total de alimento y la producción.▶ Cuando en verano aparecen períodos largos de sequía, y los suelos son apropiados una parte de la superficie forrajera de la granja podría dedicarse al cultivo de achicoria, llantén, festuca o alfalfa dado queresultan una opción viable cuando el resto de especies de pasto se encuentran bien manejadas.▶ El uso de alternativas forrajeras vale la pena tenerlo en cuenta cuando constituyen un complemento alraigrás inglés con las que mejorar la rentabilidad de la explotación. Estas ganancias son bien consideradascuando además ayudan a mejorar la frecuencia y/o el éxito de la renovación de la pradera.▶ Las especies alternativas tienen diferentes requerimientos de manejo que el raigrás inglés y el trébolblanco. De manera que efectuar la siembra de alternativas forrajeras y su manejo como si se tratase deraigrás inglés y trébol blanco no resulta factible dado que lo que es válido para el raigrás inglés y el trébolblanco no lo es para el empleo de alternativas forrajeras.▶ Es necesaria una mayor concienciación sobre el valor nutritivo de las alternativas forrajeras para su empleo en praderas o cultivos a fin de asegurar la existencia de un balance energético equilibrado y evitar laexistencia de desórdenes nutricionales en el animal a nivel ingestivo.El empleo de alternativas forrajeras puede ser una medida agroecológica útil con la que paliar los períodosde sequía en las explotaciones lecheras al permitir una produccion de forrajes más estable a lo largo de todoel año y con la que reducir los costes de alimentacion minimizando el empleo de concentrado. Siendo, paraello, esencial el conocimiento de adecuadas prácticas para su manejo