Estudio descriptivo de la patología oral en pacientes con patología cardiovascular. Estudio piloto

Resumo

Introducción La patología cardiovascular es la primera causa de mortalidad en los países desarrollados. Se ha estudiado la relación entre patologías inflamatorias crónicas y las enfermedades cardiovasculares. Las patologías dentales y periodontales son enfermedades sistémicas inflamatorias crónicas que pueden contribuir al desarrollo y agravación de las enfermedades cardiovasculares. Esta posible asociación no está del todo clara, ya que estos grupos de patologías podrían compartir los mismos factores de riesgo. Objetivos Estudiar la relación entre la patología oral y dental con las enfermedades cardiovasculares aterotrombóticas y estudiar si la patología oral y/o dental podría relacionarse con el estado cardiovascular del paciente. Material y método Se estudiaron un total de 99 pacientes que habían presentado una enfermedad cardiovascular aterotrombótica y se comparan con 50 pacientes del grupo control libres de dicha patología. A ambos grupos se les realizó una exploración oral completa, una ortopantomografía y una analítica sanguínea con parámetros cardiovasculares no convencionales. Resultados Los pacientes con Enfermedad Cardiovascular aterotrombótica presentan peor estado de salud bucodental que los pacientes del grupo control. Presentan también mayor gravedad de enfermedad periodontal y mayor número y gravedad de periodontitis apicales crónicas. Discusión La asociación entre la patología periodontal y dental con el desarrollo de las patolgoías cardiovasculares ha sido muy estudiada. Muchos estudios muestran una importante asociación entre estos grupos de enfermedades. Se han propuestos varios mecanismos que relacionan estas patologías siendo la inflamación sistémica la que parece que juega el papel más importante. La evidencia sugiere que la inflamación periodontal y dental desencadena un estado de inflamación sistémica que promueve el desarrollo y la progresión de las placas de ateroma. Conclusiones Estos datos sugieren que los pacientes con enfermedad cardiovascular presentan peor estado de salud oral que los individuos libres de dicha patología. Dado que, tanto la arteriosclerosis, como la patología oral tienen una base inflamatoria, es necesario realizar estudios longitudinales y prospectivos que comprueben la relación entre estas dos patologías.