¿Discrimina la escala de DS del MMPI la simulación de respuestas honestas y de pacientes clínicos? una revisión meta-analítica

  1. Yurena Gancedo 1
  2. Adriana Selaya 2
  3. Ramón Arce 1
  1. 1 Universidade de Santiago
  2. 2 Universidade de Vigo
    info

    Universidade de Vigo

    Vigo, España

    ROR https://ror.org/05rdf8595

Libro:
Psicología jurídica y forense: Investigación para la práctica profesional XII congreso (inter)nacional de psicología jurídica y forense Madrid, 13, 14 y 15 de febrero de 2020
  1. Ana María Martín (coord.)
  2. Francisca Fariña (coord.)
  3. Ramón Arce (coord.)

Editorial: Sociedad Española de Psicología Jurídica y Forense

ISBN: 978-83-956095-9-6

Ano de publicación: 2020

Páxinas: 9-24

Congreso: Congreso Internacional de psicología jurídica y forense (12. 2020. Madrid)

Tipo: Achega congreso

Resumo

En la evaluación psicológico forense de la salud mental es obligada la sospecha de simulación (diagnóstico diferencial), siendo el MMPI-2 la herramienta de referencia pata tal fin. La evaluación de la simulación conlleva el estudio de diferentes estrategias de engaño, siendo una de ellas la de estereotipos erróneos. Para este propósito el MMPI2 incluye la Escala Ds (Gough Dissimulation Scale), compuesta por 58 ítems, que ha mostrado ser efectiva para la discriminación entre casos clínicos reales y simuladores. Las revisiones meta-analíticas previas identificaron esta escala como una de las más potentes, pero los resultados no son válidos al no estar corregidos los tamaños del efecto promedio por el error de muestreo. Además, se ha publicado un número relevante de estudios desde la última revisión. Por ello nos propusimos una revisión actualizada y corrigiendo los tamaños. Encontramos 23 estudios de los que calculamos un total de 67 tamaños de efecto, 37 de ellos referidos a comparaciones entre simuladores y población clínica, y 30 relativos a la comparación de simuladores con población general. Los resultados mostraron que la escala es efectiva tanto en el contraste de respuestas de simulación con las de población clínica, d = 0.84[0.77, 0.91], como con las de población general no clínica, d = 0.42[0.35, 0.49]. Además, la capacidad de discriminación es significativamente mayor entre respuestas simuladas con casos clínicos reales que con población general no clínica. Se discuten las implicaciones de los resultados para la práctica profesional.