A escultura da Ordem Franciscana da diocese de Bragança-Miranda (Tomo I)
- Pires Nogueiro, María Emília
- Margarita Ruiz Maldonado Director
Universidade de defensa: Universidad de Salamanca
Fecha de defensa: 10 de outubro de 2015
- José Manuel Bernardi López Vázquez Presidente
- María Dolores Fraga Sampedro Secretaria
- Marta Cendón Fernández Vogal
Tipo: Tese
Resumo
"La Escultura de la Orden Franciscana en la diócesis de Bragança-Miranda" (Portugal) En la historia del arte portugués sigue habiendo capítulos poco estudiados. La escultura es, sin duda, uno de los núcleos menos abordados. Las contingencias que provocan esta limitación son varias, entre ellas se destaca la ausencia documental sobre la escultura o el limitado prestígio de la producción escultórica en relación con otras prácticas artísticas. En la zona periférica de estudio - la diócesis de Bragança-Miranda - esta limitación es aún más profunda. La falta de estudios sobre la escultura local se ve reforzada por la escasez documental en lo que a las esculturas se refiere. La falta de documentos contrasta con la abundante presencia de las esculturas. Entre las distintas categorías artísticas es la escultura la que más destaca en los espacios de estudio. La limitación a los espacios franciscanos se debe al hecho de que es la orden religiosa con más presencia en el territorio. La Orden Franciscana llegó a Portugal poco después de su fundación en Italia en 1209. En el área de estudio los Frailes Menores llegarón a Bragança, donde se fundó la primera casa durante el siglo XIII cuyo primer registro documental es de 1271. Las Clarisas fundarón el convento, también en Bragança, en la segunda mitad del siglo XVI después de la bendición del obispo en 1569. Posteriormente fue ocupado en 1598. Durante el conflictivo siglo XVII se fundó el convento de la Tercera Orden Regular en Mogadouro en 1618, pero las obras se prolongaron hasta 1689. En la segunda mitad del siglo XVIII, después de la licencia obtenida en 1740, se fundó el Seminario Apostólico en Vinhais en 1752. Entre 1762 y 1780 la Tercera Orden Seglar fabricó su propio templo, también en Vinhais. Otros espacios franciscanos existíeron en la diócesis, pero no sobrevivieron hasta nuestros días. Teniendo en cuenta la continuada presencia de la orden religiosa franciscana en la diócesis de Bragança-Miranda, una de las líneas que definen el campo de estudio es la funcion de los franciscanos como agentes de socialización. Las esculturas, así como todas las representaciones figurativas, ilustran los principios doctrinales que en una sociedad mayoritariamente analfabeta constituia un poderoso vehículo de transmisión de conceptos. Además de los principios eclesiásticos generales y del orden de San Francisco en particular, también la devoción popular definió las devociones y las invocaciones taumatúrgicas implicadas en las esculturas ahora estudiadas. Muchas de las identificaciones de las figuras representadas estaban ya olvidadas. Los casi doscientos años que nos separan de la extinción de las órdenes religiosas en 1834 crearon una ruptura en la memoria colectiva que reflejan las esculturas. La reactivación de la memoria colectiva que se pretende con este estudio sugiere un conjunto de diferentes enfoques cuya relación permite la aproximación a la importancia que tuvo la escultura. ¿Quiénes fueron los beneficiarios? ¿Qué talleres las realizaron? ¿Com qué materiales se produjeron? ¿Cuáles son sus principales características formales y técnicas? ¿Qué modelos artísticos tuvieron más aceptación? ¿Qué cultos y devociónes fueron más extendidos? ¿Qué tipos iconográficos favorecieron? ¿Qué principios doctrinales valoraron? ¿Qué relación existía entre la producción escultórica de los distintos espácios franciscanos de la diócesis? ¿Qué relevancia tenian las esculturas en el espacio sagrado? ¿Qué papel jugaron en los rituales? ¿Qué función tenian en las intercesiones sociales en las que participaban? A estas y otras preguntas tratamos de responder en este trabajo. Nos propusimos para ello hacer un inventario de todos los objetos escultóricos de culto y guardados en los espácios franciscanos de la Diócesis Bragança-Miranda, para posteriormente poder analizar en las formas las situaciones de originalidad, el peso del tradicionalismo y las influencias externas más importantes en la caracterización de las esculturas. El análisis iconográfico posterior permitió percibir las narrativas y evaluar las intenciones y declaraciones ideológicas expresadas en las esculturas. En este sentido, seguimos un tiempo marcado por la espiritualidad que definió el comportamiento social y las narrativas doctrinales que las obras artísticas ilustran. El estudio de la escultura de la Orden Franciscana en la Diócesis de Bragança-Miranda propició un camino para entender el arte sacro de Trás-os-Montes en su aproximacion a los valores artísticos nacionales y en sus particularidades de territorio interior fronterizo.