Consecuencias a largo plazo de los traumatismos pediátricos que precisaron cuidados intensivos

  1. Pastora Rivas Pumar
  2. Antonio Rodríguez Núñez
  3. P. Blanco-Ons Fernández
  4. Luis Sánchez Santos
  5. Lorenzo Redondo Collazo
Revista:
Anales de Pediatría: Publicación Oficial de la Asociación Española de Pediatría ( AEP )

ISSN: 1695-4033 1696-4608

Ano de publicación: 2007

Volume: 66

Número: 1

Páxinas: 4-10

Tipo: Artigo

Outras publicacións en: Anales de Pediatría: Publicación Oficial de la Asociación Española de Pediatría ( AEP )

Resumo

Introducción Los traumatismos causan una gran morbilidad pediátrica. El presente estudio pretende estimar la repercusión a largo plazo de los traumatismos graves sobre el niño y su familia. Pacientes y métodos Estudio observacional y transversal que incluyó a 209 niños ingresados en nuestra unidad de cuidados intensivos pediátricos entre 1999 y 2003 por traumatismos. Al menos 2 años después, los familiares y/o los pacientes fueron entrevistados, evaluándose su situación funcional y neurológica con las escalas Pediatric Overall Performance Category (POPC) y Pediatric Cerebral Performance Category (PCPC), así como la percepción de calidad de vida. Resultados Los pacientes tenían 13 ± 4 años cuando fueron estudiados. Las causas del traumatismo fueron por accidentes de tráfico (42,6 %), caídas (30,1 %), accidentes de bicicleta (15,3 %) y otros (12 %). La localización fue craneoencefálica (78,9 %), esquelética (20,2 %), abdominal (16,3 %) y otra (15,3 %). En la evaluación, 1,5 % de los pacientes estaban en estado vegetativo persistente, 0,5 % tenían discapacidad grave y 1 % discapacidad moderada. El 9,5 % presentaba alguna alteración psicológica persistente y el 3,8 % precisaba ayuda para realizar sus actividades diarias. La mediana (rango) de la estimación de la calidad de vida por la familia fue de 3 (0-6) en los casos con discapacidad moderada o grave. El 12,9 % de los padres refirieron una alteración seria de la dinámica familiar en relación con el episodio traumático. Conclusiones La mayoría de los niños que sobreviven a un traumatismo grave mantienen una buena situación funcional a largo plazo. Aunque son pocos los pacientes con secuelas importantes, dichos niños sufren serias dificultades para su adaptación social y ven mermada su calidad de vida.