Optimización del uso de la inseminación artificial en cunicultura

  1. Vega Fernández, María Dolores
Dirixida por:
  1. Luis Angel Quintela Arias Director
  2. Juan José Becerra González Co-director

Universidade de defensa: Universidade de Santiago de Compostela

Fecha de defensa: 10 de decembro de 2010

Tribunal:
  1. Emilio Espinosa Velázquez Presidente/a
  2. Ana Isabel Peña Martínez Secretaria
  3. Teresa de Jesús Roy Pérez Vogal
  4. Pedro J. García Herradón Vogal
Departamento:
  1. Departamento de Patoloxía Animal

Tipo: Tese

Teseo: 302066 DIALNET lock_openTESEO editor

Resumo

La presente tesis consta de 4 estudios encaminados a optimizar el uso de la inseminación artificial en cunicultura: reduciendo costes, facilitando su uso, reduciendo factores de riesgo de enfermedades y, en definitiva, incrementando su rentabilidad económica. Estudio 1: El objetivo de este estudio fue determinar si la Gondotropina Sérica de Yegua Gestante (PMSG), empleada en la sincronización de celos en conejas lactantes, podría ser sustituida por uno de los siguientes esquemas lumínicos sin que se viese afectado el rendimiento reproductivo: (a) 12-h L (luz)/12-h O (oscuridad) o (b) 8-h L/16-h O, hasta 6 días antes de realizar la inseminación artificial (IA), cuando en ambos casos el fotoperiodo era cambiado a 18-h L/8-h O y mantenido hasta el día de la IA, y en los siguientes 4 días post IA las horas de luz eran reducidas de forma progresiva hasta alcanzar los programas iniciales. Dos grupos de 20 conejas cada uno fueron sometidos a uno de los dos programas lumínicos descritos. Todas las hembras fueron inseminadas artificialmente en 6 ciclos consecutivos con un intervalo de 42 días. En la primera, tercera y quinta IAs, se empleó PMSG (20 UI/coneja vía sc 48 h antes de la IA) en los dos grupos de conejas, mientras que en la segunda, cuarta y sexta IAs no se empleó el tratamiento hormonal. El grado de sincronización de estro (también citado en el texto como receptividad sexual) fue estimado por el color de la vulva en el momento de la IA. El rendimiento reproductivo de las conejas fue evaluado basándonos en la fertilidad (tasa de gestación), prolificidad, mortalidad al nacimiento, mortalidad a los 21 días post nacimiento, peso de las camadas a los 21 días post nacimiento, y número de conejos destetados. Se consiguió una mejor sincronización del estro cuando se empleó PMSG con cualquiera de los dos programas lumínicos. Cuando no se empleaba PMSG, el fotoperiodo de 12-h L/12-h O hasta 6 días antes de la IA tuvo un mejor efecto sobre la receptividad sexual que el de 8-h L/16-h O. La fertilidad, prolificidad, mortalidad de conejos jóvenes a día 21, el peso de las camadas a día 21 y el número de conejos destetados, no varió en función de los programas lumínicos y no se vio afectado por el empleo de PMSG. La mortalidad al nacimiento, sin embargo, fue mayor (+1 gazapo muerto por camada) en aquellas camadas alojadas bajo un programa de 12-hL/12-h O. La productividad global (número de conejos destetados cada 100 conejas inseminadas) fue mejor empleando la PMSG en ambos programas lumínicos. Cuando empleamos un fotoperiodo de 12-h L/12-h O hasta 6 días antes de la IA, y omitimos el tratamiento con PMSG, la productividad global apenas se redujo, sin embargo, estuvo considerablemente afectada cuando empleamos un fotoperiodo de 8-h L/16-h O hasta 6 días antes de la IA y no se trataban con PMSG. Estudio 2: en este caso, el objetivo fue determinar si un análogo de la GnRH, la buserelina, podría ser empleado para la inducción de la ovulación en conejas sometidas a programas de Inseminación Artificial (IA) aplicándola por vía intravaginal mediante la adición de la hormona a la dosis seminal. En un primer experimento, 39 conejas de experimentación secundíparas (variedad Hyplus PS19, Grimaud, Frères, Francia, de aproximadamente 30 semanas de edad) fueron divididas en 3 grupos de 13 conejas cada uno, que en el momento de la inseminación recibieron el siguiente tratamiento: (1) grupo control: una inyección intramuscular de buserelina (0,8 microg/coneja), (2) 8 microg/coneja de buserelina adicionada a la dosis seminal, y (3) 16 microg/coneja de buserelina adicionada a la dosis seminal. El experimento fue realizado empleando 3 ciclos consecutivos con un intervalo de 42 días (n=39). A cuatro conejas de cada uno de los tres grupos se les tomó una muestra sanguínea en el cuarto ciclo para la determinación de la LH a los 0, 60, 90, 120 y 150 minutos de la IA. Los índices de preñez fueron 82% (28/34), 56% (29/36) y 85% (33/39), respectivamente para los tratamientos 1, 2 y 3. En las conejas de los grupos 2 y 3, los picos de LH fueron encontrados a los 60 minutos de la IA, mientras que en las conejas del grupo 1, el pico de LH se observó a los 90 minutos de la IA. La prolificidad no difirió entre los 3 grupos de tratamientos (la media de gazapos por camada osciló entre los 10,4 y los 10,8). En un segundo experimento fueron empleadas por vía intravaginal 3 concentraciones de buserelina (8, 12 y 16 microg/coneja), y fueron comparadas con el tratamiento control (0,8 microg/coneja por vía intramuscular). Este experimento se realizó empleando 100 conejas nulíparas (variedad Hyplus PS19, Grimaud, Frères, Francia, de aproximadamente 19 semanas de edad; 4 grupos de 25 conejas cada uno) alojadas en una granja comercial, para valorar si los resultados previos podrían ser confirmados bajo condiciones de campo. Las tasas de preñez no presentaron diferencias entre los cuatro grupos de tratamientos (P<0,05) [91,7% (22/24), 79,2% (19/24), 87,0% (20/23) y 87,5% (21/24), respectivamente para los grupos, control, 8, 12 y 16 microg de buserelina intravaginal), sin embargo, la prolificidad fue más elevada cuando empleábamos las cantidades más altas de buserelina intravaginal (11,7 frente 9,4 del grupo control). Se concluyó que la buserelina puede ser empleada para inducir la ovulación en conejas cuando se incluye en la dosis seminal, con resultados similares a los que se obtienen cuando se administra de forma intramuscular. Estudio 3: En el estudio 3 se valoró la posibilidad de modificar el porcentaje de sexo de las camadas de conejos en dos experimentos que se desarrollaron con inseminación artificial (AI) con semen fresco. En el Experimento 1 se emplearon tres momentos de AI, respecto del momento de la ovulación: (a) control, en el que la GnRH se administró inmediatamente tras la AI, estimando que la ovulación tendría lugar 10-12 horas tras la AI; (b) Inseminación temprana, en la que la GnRH fue administrada 6 horas tras la AI, para que la ovulación se retrasase hasta las 16-18 horas tras la AI; (c) inseminación tardía, en la que la GnRH se aplicó 6 horas antes de la AI, por lo que ésta se realizó 4-6 horas después de la ovulación. Se emplearon 13 conejas en cada tratamiento, y cada coneja fue empleada con el mismo tratamiento durante tres inseminaciones con un intervalo de 42 días. El segundo experimento consistió en dos tratamientos en los que las conejas eran inseminadas como en el grupo control del Experimento 1 y la AI se realizó empleando el semen preparado de la forma normal (Tratamiento 1) o bien fue centrifugado a través de 11 gradientes discontinuos de Percoll (Tratamiento 2). Se emplearon 20 conejas por tratamiento, y cada coneja fue empleada para el mismo tratamiento a lo largo de tres AI con un intervalo de 42 días. La proporción de gazapos hembra obtenidos en el Experimento 1 fue: control 41,7±19,1%, AI temprana 49,8±17,8% y AI tardía 41,4±16,4%. Esas proporciones no difirieron significativamente entre tratamientos o del porcentaje de sexo esperado 50:50. La fertilidad se vio reducida en las inseminaciones tempranas (60,0%) o tardías (73,7%) respecto al grupo control (80,0%), y las diferencias existentes entre el grupo de inseminación temprano y el control fueron estadísticamente significativas (p<0,07). En el Experimento 2, la proporción de gazapos hembra no se vio afectada por el tratamiento (control 51,1%; Percoll, 54,8%), y se obtuvieron valores de fertilidad similares para ambos tratamientos (control 76,0%; Percoll, 74,1%). La prolificidad y la mortalidad perinatal no se vieron afectados por el tratamiento en ninguno de los experimentos. Se concluyó que ni el momento de la inseminación ni la centrifugación del semen con Percoll afectaron al porcentaje de sexo en las camadas de conejos. Estudio 4: El objetivo de este estudio fue evaluar el rendimiento reproductivo de conejas inseminadas artificialmente (AI) empleando un análogo de la GnRH [des-Gly10, D-Ala6]-LHRH etilamida para inducir la ovulación mediante la administración intravaginal vehiculada en la dosis seminal. En un estudio preliminar, 39 conejas fueron divididas en tres grupos (n=13) quienes, en el momento de la AI, recibieron los siguientes tratamientos de inducción de la ovulación: (i) grupo control: 20 µg de gonadorelina administrados intramuscularmente, (ii) 25 µg del análogo de la GnRH añadido a la dosis seminal; (iii) 30 µg del análogo de la GnRH añadido a la dosis seminal. La fertilidad no presentó diferencias entre los tres grupos (control: 80,6%, grupo 2: 82,8%, grupo 3: 73,3%). En un segundo experimento fue realizada una prueba de campo para evaluar el empleo de 25 µg del análogo de la GnRH [des-Gly10, D-Ala6]-LHRH etilamida, vehiculada en la dosis seminal (n= 270) frente a los 20 µg de gonadorelina administrada intramuscularmente. La fertilidad fue más elevada (p<0,05) cuando la ovulación fue inducida mediante la administración intravaginal del agonista de la GnRH (91,1% vs 85,6%). Ni la prolificidad ni la mortalidad en el nacimiento se vieron afectadas por el tratamiento de inducción de la ovulación. En un tercer experimento, dos grupos de conejas [grupo control (n=39): la ovulación fue inducida empleando 20 µg de gonadorelina administrada intramuscularmente; Grupo de tratamiento (n=40): la ovulación fue inducida empleando 25 µg de [des-Gly10, D-Ala6]-LHRH etilamida, añadida a la dosis seminal] fueron inseminadas a intervalo de 42 días, durante cinco ciclos consecutivos de AI, para evaluar la respuesta del agonista de la GnRH tras la administración intravaginal repetitiva en los mismos animales. Ni la fertilidad ni la prolificidad se vieron afectadas por el método empleado en la inducción de la ovulación, tampoco existió una interacción entre el tratamiento y el número de parto. El último experimento tuvo como objetivo determinar si podría ser posible añadir el agonista de la GnRH en el centro de AI, justo tras la recogida del semen y su dilución, o si sería necesario añadirlo en la granja, inmediatamente antes de la AI. La tasa de gestación no presentó diferencias significativas cuando la ovulación fue inducida mediante la inyección intramuscular de gonadorelina (84,5%) o cuando el agonista de la GnRH se añadió a la dosis seminal justo en el momento (93,8%) o 24 horas antes de la IA (90,4%), pero era significativamente más baja cuando la hormona era añadida al semen 32 horas antes (76,3%). La prolificidad, sin embargo, no se vio afectada por el tratamiento de inducción de la ovulación.