Ecología del cormorán grande (" Phalacrocorax carbo ") en los ríos gallegos

  1. Iglesias González, Yaiza
Dirixida por:
  1. Jesús Domínguez Conde Director

Universidade de defensa: Universidade de Santiago de Compostela

Fecha de defensa: 08 de xaneiro de 2016

Tribunal:
  1. José Emilio Mora Bermúdez Presidente
  2. Mª José Vidal Malde Secretario/a
  3. Antonio Manuel da Silva Luis Vogal
  4. Isabel Barja Núñez Vogal
  5. Fernando Martínez Freiría Vogal
Departamento:
  1. Departamento de Zooloxía, Xenética e Antropoloxía Física

Tipo: Tese

Teseo: 405809 DIALNET

Resumo

El Cormorán grande es un invernante común en la costa y aguas continentales de la península Ibérica. La población invernante española es una de las más importantes de Europa, tanto por su número de efectivos, como por la tendencia de incremento registrada. La población gallega, de más de 4000 individuos, representa un 5 % del total de invernantes en territorio español, pero aún a pesar de su importante tamaño poblacional, existen considerables lagunas de conocimiento en relación a la dieta, distribución o ecología de la especie dentro del territorio gallego. La dieta del cormorán, principalmente ictiófaga, genera conflictos económicos y ha provocado un contundente rechazo hacia la especie en todo el territorio europeo. Así, resulta necesario profundizar el estudio y seguimiento de la especie para prevenir y resolver los presentes y futuros potenciales conflictos dentro del territorio gallego. Estado y tendencia de la población en Galicia En el capítulo 1 se evalúa la tendencia de la población invernante en Galicia asociada a medios dulceacuícolas, relacionando las posibles variaciones en la tendencia con diversas covariables y utilizando tres fuentes de información como base del análisis: censos en humedales del periodo 1987-2010, censos en dormideros nocturnos del periodo 2005-2013 y censos en tramos de río efectuados durante los inviernos de 2005 y 2011. Del análisis realizado se puede extraer que la población gallega de Cormorán grande mostró una tendencia de incremento moderado desde finales de la década de 1980 hasta 2010. Además, se observaron disminuciones en el tamaño y pérdidas de los dormideros, asociadas a la proximidad de carreteras y al distanciamiento de la costa, lo sugiere que la dinámica de abandono y reubicación de los dormideros está relacionada con la presencia y actividad humanas. Uso del hábitat En el capítulo 2 se utilizan modelos lineales generalizados y modelos Hurdle para estudiar la ocurrencia y abundancia de la especie en ríos, mediante predictores con sentido biológico y de medición sencilla: anchura del río, distancias desde cada tramo de río al dormidero nocturno y a carretera más cercanos. Los modelos obtenidos ponen de manifiesto una fuerte preferencia por los tramos de ríos más anchos y más próximos al dormidero. Los tramos más anchos proporcionarían mayor seguridad, aumentando la visibilidad a los cormoranes y su capacidad de vigilancia, y favorecerían la existencia de una mayor y más diversa comunidad de peces, lo cual podría influir en la disponibilidad de alimento y su facilidad de captura por el ave. Por otro lado, desplazamientos más cortos desde el dormidero hasta las zonas de alimentación y reposo diurno supondrían menor gasto energético para las aves, máxime teniendo en cuenta que los meses de invierno, por la menor temperatura ambiente, suponen un incremento del gasto energético. En el capítulo 3 se modela la distribución espacial de las clases de edad en los ríos, determinando cómo afectan determinados predictores a la dispersión invernal de adultos y subadultos, puesto que la competencia por el espacio y el uso de nichos ecológicos distintos por parte de los individuos jóvenes con respecto a los adultos es una práctica habitual en muchas especies. En la población estudiada, los adultos mostraron preferencia por los tramos de río más anchos, más próximos al dormidero y más alejados de la carretera, maximizando la obtención de alimento y la capacidad de vigilancia y minimizando el gasto energético derivado de desplazamientos y el riesgo de perturbaciones de origen antrópico. Los subadultos, sin embargo, aunque estuvieron ligados a los tramos más anchos y alejados de la carretera, se vieron claramente desplazados a tramos de río más alejados del dormidero, con lo que su balance energético durante el invierno podría verse afectado gravemente de no capturar suficientes presas en las zonas de alimentación. Dieta En el capítulo 4 se analiza la dieta, mediante el análisis de egagrópilas, en dos dormideros gallegos: uno ocupado por cormoranes que se alimentan en zonas con influencia marina y otro, alejado de la costa, ocupado por cormoranes que se alimentan en un medio estrictamente dulceacuícola. Se observó una marcada diferencia en la dieta entre ambas poblaciones. Los cormoranes de la localidad puramente dulceacuícola se alimentaron principalmente de Ciprínidos (80%), mientras que los de la localidad estuarina mostraron una dieta mucho más variada, y con notable presencia de especies marinas (50%). Los salmónidos no fueron muy abundantes en ninguna de las dos localidades, aunque sí contribuyeron notablemente a la biomasa ingerida en la localidad situada en un medio estrictamente dulceacuícola. Los cormoranes mostraron una dieta adaptable, oportunista y generalista, que en situaciones de elevada abundancia de presas puede causar un impacto severo sobre las poblaciones de las mismas. Distribución vertical y comportamiento en dormideros En el capítulo 5 se estudia la distribución vertical de las aves en dormideros nocturnos y la posible influencia de la edad del ejemplar. Se contabilizan y describen las interacciones agonísticas que tienen lugar durante la llegada al dormidero de los individuos que estaban alimentándose y utilizando modelos log-lineales se analiza la influencia de la clase de edad, la hora de la interacción y la altura de percha en la ubicación vertical y éxito en los encuentros entre coespecíficos. Los adultos mostraron tendencia a ocupar las partes más altas, protegidas frente a posibles depredadores o perturbaciones. Por su parte, los ejemplares subadultos quedaron relegados, en muchas ocasiones, a ocupar las zonas más bajas y expuestas y propensas a soportar las deposiciones de otros individuos con el consiguiente deterioro del plumaje. La mayoría de las interacciones por las posiciones en el dormidero se producen durante las últimas horas del día, cuando el dormidero tiene una mayor densidad de cormoranes. Los adultos fueron en este aspecto más dominantes y más competitivos. Defendieron las mejores perchas y trataron de conseguirlas con más frecuencia que los subadultos; además, mostraron un mayor éxito defendiendo sus posiciones, especialmente ante individuos más jóvenes. Los subadultos mostraron tendencia a perder sus posiciones en el caso de una interacción, quedando de ese modo con la llegada del ocaso relegados a las partes más bajas del dormidero.