Estructuras cristalográficas de proteínas de virus animales implicadas en la interacción virus-hospedador

  1. Guardado Calvo, Pablo
Dirixida por:
  1. Mark Johan van Raaij Director
  2. José Manuel Martínez Costas Director

Universidade de defensa: Universidade de Santiago de Compostela

Fecha de defensa: 19 de abril de 2010

Tribunal:
  1. Francisco Javier Benavente Martínez Presidente
  2. Carmen San Martín Pastrana Secretario/a
  3. Rubén Varela Calviño Vogal
  4. Núria Verdaguer Massana Vogal
  5. Juan Antonio Hermoso Domínguez Vogal
Departamento:
  1. Departamento de Bioquímica e Bioloxía Molecular

Tipo: Tese

Resumo

Los reovirus aviares Los reovirus aviares son virus no envueltos con un genoma segmentado de dsRNA compuestos por una doble cápside icosahédrica. La proteína ¿C es la fibra del reovirus aviar y es la proteína encargada de unirse a su receptor celular (todavía desconocido). En el presente trabajo se ha resuelto la estructura del dominio de cabeza y una parte del dominio fibroso. A partir de los datos estructurales se han localizado dos regiones que podrían estar potencialmente involucradas en la interacción con el receptor. Además se han descrito los determinantes moleculares que median su oligomerización y se ha discutido sus implicaciones en la biología del reovirus aviar. La proteína ¿A tiene una doble función en la biología del reovirus aviar, por un lado tiene una función estructural estabilizando la cápside interna y promoviendo la formación de la cápside externa y por otro lado ha sido implicada en la resistencia que el reovirus aviar presenta a la acción antiviral del interferón. En el presente trabajo se ha propuesto un modelo basado en evidencias estructurales con el que la proteína ¿A compite con la proteína PKR por el dsRNA, impidiendo de esta manera que la PKR se active e inhibiendo la acción antiviral del interferón. Los experimentos de mutagénesis dirigida, gel shift y ultracetrifugación analítica apoyan el modelo que podría tener una relevancia general para todos los reovirus fusogénicos. El adenovirus aviar 1 El adenovirus aviar 1 es un virus relativamente benigno que ha despertado interés para su uso en terapia génica. Su característica más destacada es que en cada uno de sus vértices coexisten dos proteínas fibrosas triméricas, una fibra corta y una larga. Estudios biológicos han mostrado que la fibra larga es la responsable de que el adenovirus aviar infecte mejor células que expresen el receptor humano CAR en su superficie. Sin embargo, esta fibra no parece ser esencial para el proceso de infección, lo que la convierte en una diana atractiva para su modificación. En este trabajo se ha resuelto la estructura del dominio globular de la fibra larga. Un análisis de la estructura muestra que este dominio es incapaz de interacción con el dominio D1 de CAR al menos de la misma manera en que lo hacen sus homólogos humanos. Este resultado ha sido confirmado por experimentos de cromatografía de exclusión molecular y SPR. El adenovirus porcino 4 El adenovirus porcino 4 tiene una fibra con una arquitectura inusual. Además de los clásicos dominios fibroso y globular que muestran las fibras de adenovirus presenta dos dominios C-terminales extra, un dominio que contiene un motivo RGD de interacción con integrinas y un dominio C-terminal de tipo galectina. En este trabajo hemos resuelto la estructura del dominio globular y el de tipo galectina. La estructura del dominio globular muestra que la conformación de los bucles implicados en el reconocimiento de los receptores clásicos de adenovirus no está conservada por lo que probablemente este dominio sea incapaz de reconocerlos. La estructura del dominio de galectina muestra la disposición de sus dominios CRD (dominios de reconocimiento de carbohidratos) algo que no había sido posible hacer hasta ahora. Se determinaron los azúcares con los que esta galectina es capaz de interaccionar mediante un microarray. Finalmente se resolvió la estructura de los complejos galectina-azúcar en donde se puede apreciar que residuos están implicados en esta interacción. Estos resultados permitirán el diseño de nuevos vectores de terapia génica que reconozcan azúcares específicos en la superficie de las células diana.