Estudio y conservación de ecosistemas marinos vulnerables en alta marprotección de los corales de aguas frías en la pesquería profunda española del Banco Hatton (Océano Atlántico NE)

  1. Durán Muñoz, Pablo
Dirixida por:
  1. José Emilio Mora Bermúdez Director

Universidade de defensa: Universidade de Santiago de Compostela

Fecha de defensa: 04 de xuño de 2013

Tribunal:
  1. Victoriano Urgorri Presidente
  2. María de la Cruz Pascual López Secretaria
  3. Juan Gil Herrera Vogal
  4. Antonio Vázquez Rodríguez Vogal
  5. Mariano Lastra Valdor Vogal
Departamento:
  1. Departamento de Zooloxía, Xenética e Antropoloxía Física

Tipo: Tese

Teseo: 346660 DIALNET

Resumo

La investigación sobre ecosistemas marinos vulnerables (EMVs) en alta mar, los impactos de la pesca de fondo y las medidas de ordenación para identificar, proteger y conservar los EMVs, son una prioridad hoy en día debido al mandato de las resoluciones sobre pesca sostenible de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU). Estas resoluciones reflejan las inquietudes de distintas organizaciones gubernamentales y no gubernamentales dedicadas a la conservación ambiental y a la ordenación de las pesquerías y su preocupación acerca de los efectos adversos de la pesca sobre los recursos de profundidad, las especies asociadas y los hábitats. A través de las resoluciones de la AGNU - en especial la resolución 61/105 adoptada en el año 2006 - la comunidad internacional ha exhortado a los Estados a que por sí mismos o mediante las organizaciones regionales de ordenación pesquera (OROPs), protejan los EMVs en alta mar, prohíban las prácticas pesqueras destructivas, evalúen los impactos y fomenten la pesca responsable, mencionando expresamente la importancia de la conservación de los corales de aguas frías, el valor de la biodiversidad y los efectos adversos de los artes de pesca de fondo. La AGNU ha alentado además a los Estados a que aumenten la investigación científica de los ecosistemas marinos. En este contexto, la presente memoria de tesis doctoral pretende contribuir a la implementación de las resoluciones de la AGNU, en especial de aquellos aspectos reseñados en los epígrafes sobre la pesca responsable en el ecosistema marino. Por ello, el objetivo principal de la tesis es mejorar el conocimiento de los EMVs - en particular los corales de aguas frías en los caladeros de la flota española de arrastre de profundidad del Banco Hatton (Atlántico noreste) - mediante el uso de una metodología multidisciplinar que sirva para proponer medidas de protección orientadas a la conservación de los corales. Paralelamente, la tesis explora las posibilidades de poner en práctica los conocimientos adquiridos en el Banco Hatton en otras pesquerías españolas de alta mar, presentando varios casos reales. Esta tesis doctoral es un compendio de varios artículos publicados en revistas científicas, todos ellos estrechamente relacionados. Se acompañan de la presentación de la tesis, a la que le sigue un capítulo introductorio, una discusión general - a modo de nexo entre las distintas publicaciones - las conclusiones generales, las referencias bibliográficas y un glosario de los acrónimos utilizados. También incluye información anexa sobre la transferencia de los resultados y algunos ejemplos prácticos de su aplicación a la ordenación pesquera. La memoria comienza introduciendo algunas nociones y conceptos básicos sobre la conservación en la pesca responsable, la ordenación pesquera en alta mar y las pesquerías profundas, describiendo brevemente el área de estudio y las pesquerías españolas en la zona. Seguidamente se presenta una metodología multidisciplinar específicamente diseñada para cartografiar los ecosistemas en alta mar y para seleccionar áreas de protección de los EMVs (en particular de los corales de aguas frías), así como un caso de estudio centrado en la pesquería profunda española del Banco Hatton. Esta metodología se desarrolló bajo el proyecto ECOVUL/ARPA del Instituto Español de Oceanografía (IEO), realizado por encargo de la Administración pesquera española. El método de trabajo está basado en la Ciencia Pesquera Convencional, la Geomorfología, la Ecología Bentónica y la Sedimentología. Contribuye a definir criterios prácticos para identificar los EMVs, a mejorar el conocimiento sobre su distribución en alta mar y permite asesorar a la Administración española, a la Unión Europea (UE) y a las OROPs, sobre los impactos negativos de la pesca y sobre la protección de los EMVs. El enfoque multidisciplinar se basó en la integración de la información derivada de cuatro fuentes de datos: (i) el programa de observadores a bordo de la flota arrastrera comercial, (ii) las campañas en cooperación con la industria pesquera, con planes de muestreo preestablecidos (iii) las campañas multidisciplinares de cartografiado y (iv) los gráficos del sistema de localización de buques pesqueros por satélite (SLB). Esta metodología - aunque presenta algunas limitaciones - resulta adecuada para identificar los EMVs. En determinadas circunstancias puede ser más eficaz que otros métodos alternativos, como por ejemplo aquellos basados en los encuentros con especies indicadoras en las pescas comerciales o bien los modelos predictivos de hábitat. Este enfoque se utilizó para identificar la huella de la pesquería profunda de arrastre de la flota española del Banco Hatton, localizada en el talud occidental del Banco, entre 1000 y 1500 metros de profundidad. Para ello se analizó la información recogida por los observadores científicos del IEO embarcados a bordo de la flota arrastrera comercial entre 1996 y 2006 (datos de 3675 lances). Además se cartografiaron los principales caladeros de pesca (~18760 km2) y los hábitats profundos asociados y se estudiaron las potenciales interacciones entre las pesquerías y los corales de aguas frías, mediante tres campañas científicas multidisciplinares realizadas durante los años 2005 al 2007 a bordo los buques de investigación oceanográfica BIO Vizconde de Eza y BIO Miguel Oliver. Se investigó la relación entre la morfología del fondo marino y los hábitats de los invertebrados bentónicos vulnerables, entre 600 y 2000 m de profundidad. Se utilizaron métodos acústicos (sonda multihaz, perfiladores sísmicos) así como muestreos bentónicos (dragas, boxcorer y lances de arrastre). Se describieron dos dominios: El afloramiento rocoso, denominado Outcrop (compuesto principalmente por sustratos duros) y el Drift (principalmente compuesto por sedimentos móviles). Donde el fondo marino es aplacerado y está compuesto por sedimentos móviles (Drift de Hatton), el esfuerzo pesquero de arrastre es muy intenso y las comunidades de corales de aguas frías son en la actualidad escasas, habiéndose constatado la ausencia de formaciones de arrecifes de coral. En la zona menos profunda, en la cumbre del Banco (y en las áreas del talud adyacentes a la cumbre) donde el fondo marino está compuesto por un sustrato duro rocoso con presencia de barreras y otros rasgos geológicos singulares (por ejemplo los montículos carbonatados denominados mounds), el esfuerzo de arrastre es mucho menor y las comunidades de corales son más comunes. Las zonas sedimentarias han estado sometidas a una mayor alteración debida a la pesca de fondo, por lo menos si las comparamos con las zonas de afloramiento. Este hecho, además de las condiciones ambientales, puede haber influido sobre la distribución actual de los corales. Se estudiaron los efectos del palangre de fondo de profundidad sobre las comunidades de peces y sobre los ecosistemas bentónicos en la zona del afloramiento rocoso, mediante una colaboración entre el IEO y un buque palangrero comercial, realizada en el año 2008. Para este estudio se calaron un total de 38 palangres, distribuidos principalmente a lo largo de los fondos abruptos del citado afloramiento, entre 750 y 1500 m de profundidad. Los tiburones de profundidad (Carchariniformes y Squaliformes) y los lótidos (Lotidae) fueron las especies predominantes en las capturas. Se obtuvieron altas capturas por unidad de esfuerzo de ambas en las áreas de coral. En el talud occidental del Banco Hatton se obtuvieron abundantes capturas accidentales de corales de aguas frías, así como frágiles esponjas de cristal (Aphrocallistidae). Ello confirma que este área es importante para la distribución de los corales (actualmente la zona está protegida). En el talud oriental se capturaron grandes esponjas hexactinélidas. El arte de palangre, en función de la intensidad pesquera, puede provocar efectos adversos sobre los EMVs por enganches y enredamientos. Tiene la particularidad de que además puede acceder a fondos escarpados, generalmente inaccesibles al arrastre. También se estudió la distribución de los peces de profundidad y de los invertebrados bentónicos, así como los efectos del arrastre en los fondos propicios del Banco Hatton. Este estudio se basó en una investigación cooperativa realizada en el año 2005, entre el IEO y un arrastrero comercial. Se analizaron un total de 163 lances de arrastre, efectuados entre 600 y 1600 m de profundidad. Los principales caladeros se localizaron sobre los fondos sedimentarios del talud occidental del Banco, situados en el Drift de Hatton. Las pescas estuvieron dominadas por los granaderos (Macrouridae) y los talismanes (Alepocephalidae). En cuanto a las capturas acompañantes de corales de aguas frías, estas se registraron generalmente asociadas a las zonas de afloramiento rocoso o a sus alrededores, siendo más abundantes en la cumbre del Banco y zonas adyacentes. Es de resaltar que en el talud oriental del Banco se obtuvieron abundantes capturas acompañantes de esponjas de gran tamaño (demosponjas y hexactinélidas características de los biotopos dominados por esponjas), lo que indica la presencia de potenciales campos de esponjas que se deberían proteger. Los estudios de impacto sugieren que cualquier pesquería que utilice artes de fondo (es decir las pesquerías en las que es probable que el arte entre en contacto con el fondo marino durante el normal desempeño de las operaciones de pesca, como es el caso del palangre y arrastre de fondo), puede producir algún grado de efecto adverso sobre los EMVs, si la distribución espacial y batimétrica de los EMVs se solapa con la distribución de los caladeros de pesca. Por tanto las medidas de protección para conservar los EMVs deben de aplicarse a todos los artes de fondo, no solo al arrastre. La combinación de los resultados obtenidos mediante el cartografiado, los estudios de sedimentos y de distribución de las especies indicadoras de los EMVs (en particular los corales de aguas frías) y la investigación de los impactos de los artes de pesca, permitió evaluar las prioridades de protección y conservación de los corales amenazados por las pesquerías profundas en el talud occidental del Banco Hatton. Se sugirió la ampliación del área protegida establecida anteriormente. Se propuso el cierre a la pesca de fondo de la zona de afloramiento rocoso y áreas adyacentes, como medida de protección para conservar los corales (4645 Km2 de extensión). Esta propuesta de protección fue utilizada por el Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES) como base de sus recomendaciones científicas. En consecuencia, en el año 2009, la Comisión para las Pesquerías del Atlántico Noreste (NEAFC) que es la OROP con competencias en la zona y la UE, decidieron extender el área protegida. Esta ampliación permanece actualmente en vigor (Reglamento CE 1288/2009 y Recomendación NEAFC 8:2012). Se analizó el proceso internacional de ordenación pesquera en lo relativo a la conservación de los EMVs en alta mar. Así se obtuvo una visión global de la implementación de la resolución 61/105 de la AGNU en las pesquerías del Banco Hatton para la protección de los corales. Se constató que la resolución de la AGNU ha dado un fuerte impulso a las políticas internacionales de protección y conservación en las pesquerías profundas de alta mar. La tesis doctoral presenta como se obtuvieron las evidencias científicas sobre la existencia de corales en el Banco Hatton, como se aportaron posteriormente en los foros internacionales y como se implementó la protección. Se describió el papel de los agentes internacionales implicados en la ordenación pesquera y la importancia de la investigación multidisciplinar como base de las decisiones de ordenación. Se observó que la puesta en práctica de la protección de los corales en alta mar (aguas internacionales) resultó bastante lenta, en comparación con un ejemplo acontecido recientemente en aguas costeras territoriales. Esto fue debido a los siguientes motivos: (i) inicialmente el conocimiento científico era insuficiente, (ii) la investigación en alta mar es difícil y cara, (iii) existen distintos intereses internacionales en la zona, (iv) fue necesario el acuerdo de numerosos agentes internacionales y (v) el proceso internacional de asesoramiento y toma de decisiones tal como está diseñado actualmente resultó poco ágil. En función de estas observaciones, se presentan algunas lecciones aprendidas que pueden servir para mejorar la eficacia de la protección de los EMVs en alta mar. Por ejemplo, la inclusión de los datos recopilados en colaboración con la industria pesquera en el proceso internacional de asesoramiento, puede mejorar la comprensión y el grado de aceptación por parte de los pescadores y consecuentemente las posibilidades de éxito de las medidas de ordenación. Para finalizar, se exploró la posibilidad de aplicar la metodología multidisciplinar ensayada en el Banco Hatton al estudio de otras pesquerías españolas de alta mar, discutiendo los progresos, las dificultades y los desafíos de la identificación, protección y conservación de los EMVs. Se describió como España, en calidad de nación pesquera con flota en alta mar, ha venido realizando estudios sobre EMVs desde el año 2005, en los caladeros situados en aguas internacionales del Océano Atlántico, en respuesta a las resoluciones de la AGNU. Estos estudios, algunos de ellos realizados en colaboración con otros Estados, proporcionan asesoramiento a las OROPs y a la UE. Se resumieron los principales resultados de ordenación pesquera derivados de estos trabajos multidisciplinares, a saber: (i) contribución a la identificación de corales de aguas frías y protección de un área (~16000 km2) en el Banco Hatton (Atlántico noreste, área de regulación de NEAFC), (ii) obtención de una base de datos internacional para refinar las actuales áreas cerradas a la pesca e identificar nuevas zonas vulnerables en el Gran Banco de Terranova, Flemish Pass y Flemish Cap (Atlántico noroeste, área de regulación de la Organización para las pesquerías del Atlántico Noroeste-NAFO), (iii) mejora del conocimiento sobre los ecosistemas profundos en la Dorsal de Walvis y en los montes submarinos adyacentes (Atlántico sureste, área de regulación de la Organización para las pesquerías del Atlántico Sureste-SEAFO), e (iv) identificación de áreas vulnerables y protección de un área en alta mar (~41300 km2) en la plataforma y el talud patagónico (Atlántico suroeste), en una zona donde no existe OROP.