Estudios "in vitro" de interacciones del polimetacrilato de metilo (pmma) con componentes de la lágrima

Resumo

Una de las características más importante que debe poseer una lente de contacto es su permeabilidad a los gases (oxígeno y anhídrido carbónico), con el fin de que la córnea mantenga en todo momento su normalidad En el caso de lentes rígidas, fabricadas a base de polímeros de metacrilato de metilo (PMMA), este material no es permeable al oxígeno, por lo que el aporte de éste al ojo debe hacerse a través del parpadeo. En efecto, al parpadear se renueva la lágrima entre la lente de contacto y la córnea, intercambiando una película con bajo contenido en oxígeno por otra rica en este elemento. Ahora bien, el depósito de lípidos y proteínas procedentes de la lágrima sobre la lente de contacto, obstruyendo los poros de la misma, puede impedir el acceso del oxígeno a la córnea provocando daños irreversibles en la superficie ocular, además de otros efectos adversos como la despolimerización del material,su pérdida de transparencia, provocar reacciones alérgicas en los ojos y favorecer una posible contaminación microbiana. De acuerdo con esto, es importante conocer la naturaleza de las interacciones lágrima-lente de contacto, con el fin de eliminar las mismas o, en todo caso reducirlas al máximo, siendo este el objetivo que se busca con la Tesis Doctoral propuesta, es decir, establecer el mecanismo de la interacción de los componentes lipídicos y proteicos de la lagrima con el metacrilato de metilo, componente principal de las lentes de contacto rígidas de PMMA. Dicho componente tambien forma parte de la composición de lentes de contacto hidrofóbicas permeables a los gases y de lentes de contacto hidrofílicas no iónicas. Para ello se utilizará la técnica de monocapas, que constituye un excelente modelo, in vitro, de la capa lípidica de la lágrima. En efecto, la orientación de los lípidos extendidos sobre la superficie del agua cuando forman una monocapa es tal que los grupos polares de los mismos se anclan en el agua, en tanto que las cadenas hidrocarbonadas se dirigen hacia el aire. Esta misma disposición de las moléculas lipídicas se observa cuando se estudia la capa lípidica de la lágrima.